Semana 31 de la VIII edición del concurso Relatos en cadena, organizado por @laventana y @deescritores. La a frase de inicio era "Salió, sigilosa, a estirar las piernas". Y en menos de cien palabras...
Salió,
sigilosa, a estirar las piernas. Las notaba entumecidas después de tanto rato
en la cama fingiendo que dormía. Pensó que hicieron bien en comprar aquella
casa en el campo porque ahora podía salir al exterior y, casi a oscuras, dar
vueltas por el jardín. Sacó el paquete de tabaco de su escondrijo. Se repitió
que tendría que dejarlo. Mientras se encendía el segundo, sopesó una
posibilidad. Después, otra. Se imaginó dando un beso a sus hijos y dejando una
nota. Casi al alba, decidió que era hora de volver a la cama. Quizá pusiera lentejas
para comer.
Uy Lidia cuanta historia encierra tu relato. Toda una vida llena de fustraciones y deseos y no tener fuerza para enfrentarse a ese paso definitivo. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Muchas gracias. Eres muy amable. Los besos van de vuelta. Un abrazo.
EliminarTransmite mucho tu relato Lidia, frustraciones, esperanzas, desvelos, y un final abierto para que el lector siga con la historia.
ResponderEliminarBuen relato.
Saludos.
Muchas gracias, Alfonso. Me alegro de haber conseguido transmitirte todo eso. Un abrazo.
EliminarMuchas gracias, Alfonso. Me alegro de haber conseguido transmitirte todo eso. Un abrazo.
EliminarMuchas gracias, Alfonso. Me alegro de haber conseguido transmitirte todo eso. Un abrazo.
Eliminar