Mi propuesta en la tercera semana de la VIII Edición de Relatos en Cadena, organizado por @deescritores y @laventana. La frase de inicio esta vez era "Deberías airearte un poco". A partir de ahí y en no más de cien palabras...
Asuntos internos
Deberías airearte un poco, le aconsejó su marido. Sofía obedeció. Escogió su traje de Armani negro, quizá no muy adecuado para esa hora de la tarde. Frente al espejo del tocador se maquilló concienzudamente, con mimo. Cogió el bolso, las gafas de sol, musitó un adiós, bajó las escaleras, esperó a que el portero le abriera y por fin salió a la calle. Un día más pasó frente a la comisaría. El policía la saludó con deferencia. Sofía esbozó una leve sonrisa y comprobó que no se le movía ningún diente. Toda una suerte porque mañana presidía un juicio y había que estar presentable.
Qué jueza más moderna. Suerte la próxima semana.
ResponderEliminarHas llevado la situación al máximo. No va más. Una juez castigada entre silencios por el maltrato. Además del final con el que le das todo el sentido a la historia cómo has hilvanado todas esas acciones me ha encantando. Relatazo. Un abrazo :)
ResponderEliminarUn micro con mucha miga, es buenísimo.
ResponderEliminarBesos
Nos engañas hasta el final; esa jueza sometida nos muestra su situación con elegancia, casi sin darnos cuenta.Muy bueno, Lidia, Encantada de leerte.
ResponderEliminarBuen relato Lidia.
ResponderEliminarUn texto muy bien trenzado que va dando pequeñas pistas de la trama de encierra en su interior.
Muy buen intento.
Suerte para la próxima.
La vida interior y la vida exterior. Sí que hay muchas cosas que airear en esta sociedad, sí. Buen granito de arena el que has puesto Lidia.
ResponderEliminarSuerte con la próxima, un saludo.
Y tanto que asuntos internos, Lidia. Asuntos que se friegan en casa y para cuando se airean, puede que sea demasiado tarde. EL tema del maltrato cobra tanto impulso en nuestra sociedad que muchas veces me pregunto cuáles serán los datos verdaderos, los de verdad, esos que hacen recuento de lo que no se cuenta.
ResponderEliminarUn abrazo y buen micro. Las gafas de sol en un día de lluvia también hubiesen puesto una guinda adicional. ;)